Este texto de Jorge Luís Borges es como el abrazo de un amigo que te entiende porque ha vivido sus propias tragedias, las personas que tienen heridas son más comprensivas con las demás ¡Gracias Jorge! "De tanto perder aprendí a ganar; de tanto llorar se me dibujó la sonrisa que tengo. Cono zco tanto el piso que sólo miro el cielo. Toqué tantas veces fondo que, cada vez que bajo, ya sé que mañana subiré. Me asombro tanto como es el ser humano, que aprendí a ser yo mismo. Tuve que sentir la soledad para aprender a estar conmigo mismo y saber que soy buena compañía. Intenté ayudar tantas veces a los demás, que aprendí a que me pidieran ayuda. Trate siempre que todo fuese perfecto y comprendí que realmente todo es tan imperfecto como debe ser (incluyéndome). Hago solo lo que debo, de la mejor forma que puedo y los demás que hagan lo que quieran. Vi tantos perros correr sin sentido, que aprendí a ser tortuga y apreciar el recorrido. Aprendí que en