Me ocurre algo curioso y lo observo mucho en mi hijo también, cuando todo el mundo corre a la derecha yo tiro para la izquierda, si se pone algo de moda yo exploro otras posibilidades, si los demás aceptan algo por norma yo lo cuestiono y no, no soy la única, hay una banda por ahí de cabras rebeldes que me hacen sentir acompañada, parte de una tribu de maduros emocionales (eso creo, a ratos ja ja ja ) e inmaduros sociales que nos está costando mucho encontrar nuestro lugar en el mundo porque nos hemos dado cuenta que nuestro nido va con nosotros, no hay lugar al que ir, el lugar late dentro de nosotros, somos nómadas, queremos y necesitamos sentirnos parte de todo y de nada. No somos patriotas (nuestra patria es el MUNDO) , no tenemos bandera, no queremos fronteras, no aceptamos límites, pero sabemos respetar a los patriotas, a los religiosos y a cualquier persona que tenga otra forma de vivir.
Mi única bandera es un abrazo, mi bandera es de piel, de carne, de huesos y une los trozos rotos de un alma perdida.
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