«Cuando descubres, con la edad, la cantidad de cualidades y potencial que hay dentro de ti, te entran ganas de convertirte en bruja.»
«Con nuestra insistencia en que el método científico es el único medio de conocer el mundo, mantenemos cerradas las puertas de la percepción; la sabiduría de Oriente nos es negada, y nuestro propio mundo interior queda limitado. Oriente y Occidente son dos mitades de un todo, representan los dos aspectos internos de cada individuo, hombre o mujer. La escisión psicológica puede curarse a través de una unión interior, que permita un flujo entre los hemisferios izquierdo y derecho, entre lo científico y lo espiritual, lo masculino y lo femenino, el yin y el yang.»
Jean Shinoda Bolen en El Tao de la psicología.
En este artículo Jean nos habla de las quejas y como nos impiden avanzar ¡te motivará!
«Una vez que la mujer se vuelve consciente de las fuerzas que influyen sobre ella, obtiene el poder que ese conocimiento proporciona. Las "diosas" son fuerzas poderosas e invisibles que moldean la conducta e influyen en las emociones.
Las diosas de cada mujer
El conocimiento acerca de las "diosas" dentro de las mujeres constituye un nuevo territorio para el aumento de la conciencia sobre las mujeres. Cuando una mujer sabe qué "diosas" son las fuerzas dominantes dentro de ella, adquiere un autoconocimiento sobre la fuerza de ciertos instintos, las prioridades y las capacidades, y también las posibilidades de encontrar un propósito personal a través de las opciones que toma y que otras personas pueden no estimular.»
«La mayoría de las personas que veo en mi consulta son adultos maduros. Se lanzan a lo que resulta ser un viaje de individuación que requiere que se enfrenten a la verdad y a la verdad de sus sentimientos, y a fin de vivir auténticamente, se arriesgan a la comunicación genuina. Para muchos de ellos, el viaje empieza sin heroicidad, con abandono o divorcio, la quiebra de un negocio, una dolencia física grave que, quizás, pone en peligro su vida, una enfermedad psíquica o el reconocimiento de que uno ha estado viviendo una mentira, de que es codependiente o de que tiene alguna adicción.
El paso del mundo conocido al de la psicoterapia, o análisis como punto de partida de este viaje, se da como aquella opción consciente que nace del dolor y la necesidad, y no como vocación de aventura. Sin embargo, puedo añadir que cuando el alma se ve comprometida con el proceso, y la persona abre la fuente de sentido interior, la vida se convierte en una aventura.»
Jean Shinoda Bolen en El anillo del poder.
«Una persona solo responderá a la llamada de la aventura o del amor, y a las lecciones que inevitablemente comportan estas experiencias, cuando esté disponible. El dicho oriental "cuando el alumno esté preparado, vendrá el maestro" describe esta conexión sincrónica entre la disponibilidad interna y los acontecimientos externos.»
«Estar en un círculo es una práctica de aprendizaje y crecimiento que se nutre de la experiencia y la sabiduría, del compromiso y el valor de cada una de las mujeres que hay en él.»
Jean Shinoda Bolen en Viaje a Avalon.
«Cuando somos aceptados y se nos permite ser auténticos, es posible tener autoestima y autenticidad al mismo tiempo. Esto solo se llega a desarrollar si las reacciones de las personas que nos importan nos animan en vez de descorazonarnos, cuando somos espontáneos y sinceros, o cuando estamos absortos en aquello que nos produce felicidad.»
Jean Shinoda Bolen en Los dioses de cada hombre
«La idea de reconocer una misión cuando esta llega crece a partir de encuentros personales con gente cuyas vidas y “misiones” son congruentes, genuinas y están implicadas en el servicio. Hay muchas buenas causas para implicarse, pero la misión a que me refiero lleva escrito su nombre, escrito de tal manera que solo usted sabe que es la suya. Es algo a lo que usted se presta voluntario. Asumir una misión es uno de los aspectos de la individuación, de ser auténtico con uno mismo, de encontrar un camino que surge del corazón o de la vida elegida. Es trabajar con el alma. Y como muchos que empezaron con algo pequeño pero con sentido podrán decirle, siempre se va paso a paso.»
Jean Shinoda Bolen en El nuevo movimiento global de las mujeres
«He escrito Las diosas de la mujer madura para que las mujeres puedan nombrar y reconocer aquello que les inquieta. El origen de estos sentimientos son los arquetipos de la diosa que hay en nuestro interior, los patrones y las energías de la psique. Al saber quiénes son las diosas, las mujeres pueden llegar a ser más conscientes de las potencialidades que hay en ellas, las cuales, una vez reconocidas, son fuente de espiritualidad, sabiduría, compasión y acción. Cuando los arquetipos se activan, por consiguiente, nos proporcionan energía y nos transmiten una sensación de autenticidad y de haber encontrado un sentido a nuestra vida.»
Jean Shinoda Bolen en Las diosas de la mujer madura
«Creo que en cada enfermedad concreta, así como en cada vida individual, las preguntas espirituales son idénticas: ¿Qué hemos venido a hacer aquí? ¿Qué hemos aprendido? ¿Qué hemos de curar? ¿Qué y a quién hemos amado? ¿Para qué estamos aquí? Preguntas que tienen que ver con la esencia de lo que somos. Estoy convencida de que la enfermedad es una llamada a la conciencia –algunos dirán que es una llamada al despertar–, que implica un descenso a las profundidades y una exposición a cuanto tememos.
El sentido de la enfermedad
He visto cómo la enfermedad desenterraba los afectos y revelaba fortaleza de carácter, y soy consciente de que constituye una oportunidad para el crecimiento espiritual. O no. Creo que los cuentos y los mitos, los sueños y las experiencias místicas pueden tornarse más vívidos durante las enfermedades, y que incorporar el conocimiento espiritual emanado de esas fuentes a la vida cotidiana hace que tanto la vida como la muerte adquieran sentido.»
Jean Shinoda Bolen en El sentido de la enfermedad
«Las mujeres aprenden a través de la conversación. Las historias de las mujeres pueden inspirar respuestas del tipo: «¡Si ella puede hacerlo, yo también!». Igualmente pueden servir de advertencia para actuar con cautela; una mujer escucha y se toma en serio lo que oye: «Lo que ha ocurrido podría ocurrirme a mí». Las mujeres siempre han intercambiado, además, información práctica, desde recetas de cocina a referencias profesionales. En las conversaciones entre mujeres, el apoyo nace de la empatía y es real, se resuelven problemas y el estrés se alivia; es para lo que, como género, tenemos un talento natural, lo cual ha fomentado en nosotras nuestros roles sociales, sobre todo el de madres. La charla de las mujeres establece conexiones simétricas, en lugar de jerarquizadas, y una forma de construir consensuada; ambos, elementos necesarios para la cooperación y la colaboración».