Soy una madre treintañera de un hijo tresañero y tengo que decir que él me enseña a mi mucho más de lo jamás imaginarías, me enseña a :
-Levantarme con un propósito cada día,un propósito profundo como las raíces de un secuoya o la parte invisible de un iceberg.
-Disfrutar de cada instante y aceptar que no soy perfecta ni como madre ni como mujer, soy mucho más que un "cuadrado", soy un círculo infinito de lecciones y experiencias.
-Quedarme con lo importante y sentirme capaz de todo. Hay pocos imposibles que me queden por superar y el miedo ya no me acompaña a diario, hemos llegado a una tregua.
Te quiero bebé, te amo hasta las estrellas y más allá. Te amo hasta el final de la última galaxia ida y vuelta y así un billón trescientas cuarenta y ocho mil viajes más. Te amo hasta el sol pasando por Plutón y Venus un trillón de veces. Te amo con cada célula.
Como te digo cada noche al acostarte "mamá siempre estará contigo, siempre, siempre, siempre, hasta cuando no me veas, estaré contigo, porque mamá hace magia potajia y te acompaña siempre ¿lo sabes? " tú me miras con esa sonrisa y esos ojos radiantes, se que sabes que lo que digo no es una simple promesa, es la verdad ¡SIEMPRE CONTIGO MI VIDA HASTA EL INFINITO Y MÁS ALLÁ!
Te interesa leer "Aciertos y errores a la hora de ser padres".
Que bonita entrada muchas felicidades a tu peque y a tí!!besos
ResponderEliminarMuchas gracias preciosa, los hijos son los maestros más maravillosos de éste mundo :)) me encanta ser su madre,muaksssss
EliminarPreciosa y emocionante entrada, un besazo.
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