"De pequeña sufrí malos tratos, creo que tenía una diana donde ponía "pegar fuerte, soy de goma", cuando iba al cole no me libraba de la tortura porque unos cuantos compañeros vieron la diana y me convirtieron en el objeto perfecto de sus burlas, golpes e insultos, así que llegaba a casa y no podía decir nada e iba al cole y tampoco podía decir nada ...A veces la tranquilidad se sucedía entre el cole y la casa, aunque era muy pequeña iba al cole sola desde primero de EGB, recuerdo cómo caminaba y cómo algunos vecinos mayores me llamaban la atención... iba mirando hacia abajo siempre o leyendo, con los hombros encogidos como si fuera un papel arrugado ...
Mi refugio eran los animales que adoraba, mi perro, mi precioso pastor alemán que era tan bueno y tan noble. Mi abuela también me consolaba y yo echaba de menos vivir con ella como en los primeros años cuando iba de su mano cada día a la guardería. También salvaba gatos, detrás del colegio había un bosque de eucaliptus y un día escuché maullar a los gatitos, cuando llegué la mayoría estaban muertos y quedaban dos, les pregunté si me los daban y me dijeron - ¿Qué nos das a cambio? - tenía 25 pesetas y se las dí, prometiéndoles que al día siguiente les traería otros 5 duros por el otro gatito ...Los escondí dentro de mi jersey para darles calor y para evitar que me lo vieran por el camino y decidieran quitármelos.
Otro de mi refugios eran los libros, leí todo lo que pude y más, algunos libros ni siquiera los entendía porque eran para adultos pero yo seguía leyendo, leer era como salir de la cárcel, escapar de mi piel, dejar de ser diana para ser simplemente una niña ...
De mi infancia recuerdo con amor los abrazos de mi abuela que al mirarme me decía - Eres la niña más buena del mundo ... "
Mi refugio eran los animales que adoraba, mi perro, mi precioso pastor alemán que era tan bueno y tan noble. Mi abuela también me consolaba y yo echaba de menos vivir con ella como en los primeros años cuando iba de su mano cada día a la guardería. También salvaba gatos, detrás del colegio había un bosque de eucaliptus y un día escuché maullar a los gatitos, cuando llegué la mayoría estaban muertos y quedaban dos, les pregunté si me los daban y me dijeron - ¿Qué nos das a cambio? - tenía 25 pesetas y se las dí, prometiéndoles que al día siguiente les traería otros 5 duros por el otro gatito ...Los escondí dentro de mi jersey para darles calor y para evitar que me lo vieran por el camino y decidieran quitármelos.
Otro de mi refugios eran los libros, leí todo lo que pude y más, algunos libros ni siquiera los entendía porque eran para adultos pero yo seguía leyendo, leer era como salir de la cárcel, escapar de mi piel, dejar de ser diana para ser simplemente una niña ...
De mi infancia recuerdo con amor los abrazos de mi abuela que al mirarme me decía - Eres la niña más buena del mundo ... "
Es increíble que detrás de una triste historia hay una hermosa mariposa con unas alas magníficas, llenas de amor y ternura, que aprendió a volar muy alto.
ResponderEliminarFeliz fin de semana guapa, y gracias por las etiquetas son muy bonitas.
Hay tantas historias tristes que crean personas hermosas ;-) Un abrazote enorme Tania, disfruta mucho del finde y de las pizzas, cada vez que pienso en ti me da un antojoooo :-)
ResponderEliminarOooohhh...yo también tuve una abuela mariposa.....y no crees q algunas de las personas q te hicieron daño ha pagado por ello en vida?
ResponderEliminarPues no lo se, no quiero que lo paguen, con que dejen de hacerlo es suficiente , un abrazote enorme
ResponderEliminarYo tampoco quise q lo pagaran...de hecho les perdone...pero creo q han cambiado y q la vida les ha dado una leccion brutal...
EliminarA veces pasa y es triste, ...un abrazote enormeee
EliminarHe aprendido de ti, que aunque cueste se puede. Todo lo que has pasado te ha hecho ser una supermariposa te admiro y te quiero con locura CVCQ
ResponderEliminarAisss mi peque, yo también he aprendido tela de ti y si se puede, aunque nos cueste un poquillo mas no pasa ná, nos hacemos mas fuertes , te quiero mariposa preciosisimaaaaaaaa :-) CVCQ por supuesto jajajaja
EliminarGracias por abrir aun más tu corazón y compartir esta amarga experiencia que a pesar de lo tremendo ha ayudado a que hoy seas la maravillosa persona que eres hoy.
ResponderEliminarYo tuve la suerte de tener una infancia feliz rodeada del calor y el cariño de mis padres, hermanos y mi preciosa abuela.
Pero también se lo que es llegar a la escuela y solo recibir desprecios por parte de las compañeras de clase.
Aunque hace poquito que nos conocemos, te envió un abrazo enorme lleno de cariño.
Un abrazote enormeee Eva, me alegra muchísimo que hayas tenido una infancia bonita y siento tristeza pq se haya empañado por esos compañeros abusones que no se donde aprenden hija mia pero anda que no hacen daño, un abrazote enormeeee
EliminarLo que cuentas te hace parecerme aún más grande de lo que ya me parecías... Haber sido un gusano de seda indefenso y después de todo convertirte en una mariposa de alas grandes y de impresionantes y alegres colores habiendo vivido eso desde bien chiquita...
ResponderEliminarYo también sufrí maltrato, aunque no en mi infancia. No era físico, pero sí psicológico... Al ser adulta lo afrontas de forma distinta, pero cuesta salir de eso... mucho... (creo que solo lo sabe la persona que ha pasado por ello). Pero con trabajo y el cariño de los que me rodeaban volví a quererme a mí misma. Pero es cierto que esas heridas no llegan a desaparecer, cicatrizan pero ahí se queda la marca...
Un besazo, guapa!! Y gracias por compartir esto con nosotr@s!
El maltrato psicologíco es durísimo y cuesta mucho volver a unir los pedacitos, me alegro mucho que hayas tenido una redde afecto que te haya ayudado, eso es super importante !! Mira , tendremos marquitas pero nos quedan bonitas ;-) Son señales de que hemos vivido y mucho, podemos ayudar a mucha gente , un abrazote enormeeee
EliminarSarah, preciosa, me he quedado sin palabras. Sabía que habías tenido una infancia dura, pero no hasta esos extremos. Para mi, eres la alegría y el amor inmenso personificado. Siempre rescatando mariposas con alas rotas, generosa, siempre dispuesta a ayudar, siempre ahí para todos. Eres como una inyección de vida en cada comentario, en cada foto. He aprendido tanto de ti! Has sabido crecer de la nada hasta convertirte en una supermujer, supermama, superamiga, superesposa, superamorosa y supertodo, Eres "mi ídola" :) Te admiro y te quiero muchísimo, nunca dejes de dar tanto amor!!! y digo como mi gemeliña del alma, siempre cvcq. Un millón de besos para ti y para esa maravillosa familia que has formado.
ResponderEliminarAbrazotes para una de mis mariposas favoritas, llena de generosidad y amor,muakssssssssssss
EliminarAcabo de flipar. Así, con todas las letras. Madre mía Sarah. Eres muy muy fuerte por atreverte a verbalizar esto que cuentas. Muchos en tu situación no serían capaces lo que denota que eres una mariposa pero con unas alas de acero. No me entra en la cabeza que haya gente que trate así a los niños. Es que lo pienso y se me ponen los pelos de punta. Cuánto me alegro de que seas unas super mamá como dicen por ahí arriba. Un abrazo muy muy fuerte guapa!
ResponderEliminarGracias Olga, me ha costado toda la vida llegar a verbalizarlo y sobre todo no sentirme culpable, porque los niños siempre se sienten culpables y no hay nadie que les diga que ellos no son el problema, un abrazote enormeee, gracias por cada abrazo que me dejas entre líneas :)
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